jueves, 2 de junio de 2011

BAUHAUS: LA BANDA SIN CIELO



Bauhaus fue la banda fundadora del género al que se denominó como rock gótico. El grupo, surgido de la evolución del punk tardío, supo desarrollar un sonido único y tremendamente personal, basado en el minimalismo, lo oscuro, lo tétrico, lo sobrenatural y lo grotesco. Todo ello mezclado con una estética oscura y depresiva que les hizo inconfundibles. La historia de Bauhaus es sorprendentemente breve para la influencia que ejercieron, y que hoy todavía perdura. Formados en 1978 y separados en 1983, la actividad generada por la banda y el peso de su influencia les convirtieron en un grupo que gozó, y todavía goza, de un culto impresionante. Su música, basada en un sonido sombrío y obsesivo, transmitía la misma sensación que un tren fantasma que circula sin conductor y cuyo pasaje está compuesto por vampiros y muertos vivientes.


Compuesta por el cantante Peter Murphy, el guitarrista Daniel Ash, el bajista David Jay y el batería Kevin Haskins, la banda dió lugar al rock gótico, género que crearon de la nada a base de interiorizar influencias como el glam rock, el punk, las referencias literarias y los clásicos del cine de terror en blanco y negro. El resultado fueron unas canciones que crecían en espirales hipnóticas entre húmedos bloques de piedra de una catedral gótica. Bauhaus siempre gustaron de bailar en habitaciones oscuras. Sorprendentes, epatantes y espectaculares, Bauhaus operaban con una exquisita mezcla de orgullo, depresión, luminosidad hiriente e impresionismo sonoro. Sus primeros discos eran auténticas ceremonias de aquelarres celebrados entre sombras, una turbadora vorágine de opresión casi mística que atrapaba y envolvía al oyente entre salmos lóbregos y visiones de pesadilla.


The Sky’s Gone Out fue su tercer álbum en estudio, y el que cosechó un mayor éxito comercial de toda su carrera, llegando a la cuarta posición en los charts británicos. Publicado en 1982, muestra a la banda en todo su esplendor místico y creativo y gozando de una madurez compositiva e interpretativa traducida en inteligente evolución. A su habitual estiló gótico y oscuro incorporan nuevas propuestas sonoras basadas en el tratamiento electrónico de los instrumentos, que les lleva a producir atmósferas más densas incluso que en anteriores trabajos. Desde el inicio del disco, con una demoledora versión del tema de Brian Eno Third Uncle, hasta la triste y depresiva despedida con el tema final, Exquisite Corpse, todo el álbum es un atormentado paseo por los abismos del alma humana, un fascinante recorrido por la locura, la enfermedad y la muerte, un apasionante viaje musical que refleja perfectamente la atormentada visión del rock que Bauhaus poseía.


Canciones como la inquietante Silent Hedges, con sus retorcidas visiones sobre el descenso a los infiernos, o All We Ever Wanted Was Everything, llena de desolación y pesimismo, nos traen a unos Bauhaus más reposados y cerebrales que de costumbre, aunque igualmente turbadores. Por su parte, piezas como In The Night o Swing The Heartache nos traen a los clásicos Bauhaus de ambientes opresivos y sonidos escapados de una película de terror de los años treinta. Aunque las dos joyas indiscutibles del álbum son The Three Shadows, composición dividida en tres partes en la que el grupo realiza toda una demostración de habilidad para retratar la desesperación. La otra canción clave es Spirit, uno de sus mayores éxitos en formato single, una curiosa declaración de amor y reverencia hacia sus fans, siempre entregados de brazos abiertos a las fantasmagóricas liturgias que representaban sus conciertos.


Un año después de publicarse The Sky’s Gone Out, la banda se separaba por diferencias entre Peter Murphy y el resto del grupo. La típica batalla de egos de toda la vida en el mundo del rock. Pero la historia no acabó aquí, pues en 1998 Bauhaus se reunió de nuevo para realizar una gira mundial y publicar un grandes éxitos y un álbum en directo, y lo mismo hicieron años más tarde, cual Ave Fénix, resurgiendo periódicamente de sus todavía calientes cenizas. Los señores oscuros siempre han esperado a sus seguidores con los brazos abiertos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario